Mucho se habla de ella pero poco se explica. Para que sepas realmente qué es, qué hace y cómo combatirla, sigue leyendo nuestra nota.
La placa bacteriana es una película incolora y pegajosa que se genera y aglutina sobre todas las superficies de la boca, como dientes y encías. Aunque también puede depositarse en aparatos de ortodoncia y prótesis.
El gran problema con esto, es que se trata del principal generador de caries y enfermedades periodontales. De hecho, la placa crea el sarro, una capa dura que se instala sobre los dientes y que puede causar la caída de ellos.
En cualquier caso, no siempre la placa bacteriana forma sarro y, en ese caso, no se ve por ser incolora. Para hacerla visible, se usan reveladores de placa bacteriana, cuyas sustancias la tiñen y puede ser reconocida al ojo humano.
Gracias a este sistema, el odontólogo podrá contar las caras de los dientes que se han teñido, y según la cantidad de piezas dentarias que estén presentes en la boca, calculará un índice (Índice de O´Leary). Si el resultado es superior al 10%, significa que se está realizando una higiene oral defectuosa, además, indicará dónde se debe profundizar el cepillado.
¿Cómo prevenirla?
Llevando una adecuada higiene dental. Parte con el uso de hilo o seda dental, para que puedas remover todos los residuos de alimentos que quedan entre tus dientes.
Después, sigue con un correcto cepillado, mínimo 2 veces al día. Lávate los dientes con una pasta dental que tenga flúor.
Clínica Dental Sonríe
«Sanamos Sonrisas»